Clase de toreo. Esta es la lección que recibieron el pasado lunes los agentes de la Guardia Vivil que asistían a la academia del Instituto armado en Baeza (Jaén) para ascender a suboficial de la Benemérita. La peculiar clase, por parte de un miembro de la Guardia Civil, incluyó el uso con destreza del capote, la muleta y la espada ante un público que, por momentos, vitoreó y aplaudió la exhibición. 
“Una cosa es que se impartan conocimientos para que los nuevos suboficiales puedan ejercer de delegado gubernativo en los festejos con espectáculos taurinos que se celebran en muchos pueblos y otra muy distinta es enseñar a torear”, denunció Juan Fernández, portavoz de Asociación Unificada de la Guardia Civil, en declaraciones a El País
La asociación ya denunció el derroche de dinero público de la Guardia Civil por enviar el pasado mayo a guardias civiles, militares y curas españoles a una peregrinación de primavera al santuario de Lourdes, en Francia, que terminó con una animada conga al ritmo del pasodoble Que viva España.